La Autoridad de Regulación Prudencial del Banco de Inglaterra ha emitido una solicitud de datos solicitando a las empresas que revelen sus exposiciones actuales y planificadas a “criptoactivos”.
El declaración solicitó a las empresas que revelen sus “exposiciones a criptoactivos” actuales y futuras esperadas y que expliquen su uso del marco de criptoregulación de Basilea. Estos activos incluyen activos tokenizados y monedas estables.
Las empresas tienen hasta el 24 de marzo de 2025 para enviar sus respuestas.
La PRA enfatizó que la información informará su formulación de políticas, incluida la calibración de los marcos prudenciales para gestionar las exposiciones a los ‘criptoactivos’. Esta iniciativa se alinea con el marco global de Basilea, que orienta el tratamiento prudencial de los criptoactivos.
Uso de activos tokenizados y monedas estables
El Banco de Inglaterra está particularmente interesado en comprender cómo las empresas enfrentan los riesgos asociados con los activos tokenizados y las monedas estables mientras participan en actividades comerciales relacionadas con las criptomonedas.
En julio, el Banco de Pagos Internacionales se asoció con el Banco de Inglaterra en un proyecto piloto llamado “Proyecto Pyxtrial” para rastrear las reservas de monedas estables. El proyecto esperaba ayudar a los reguladores con datos casi en tiempo real sobre los pasivos y activos de respaldo de las monedas estables, utilizando tecnologías de recopilación, almacenamiento y análisis de datos.
De manera similar, la actual solicitud de recopilación de datos tiene como objetivo analizar los costos y beneficios de posibles enfoques regulatorios y establecer una línea de base para monitorear la evolución del sector, según el comunicado.
No todas las empresas están obligadas a presentar una respuesta. La PRA aclaró que sólo las entidades con exposiciones o actividades relevantes en criptoactivos deben proporcionar información. Sin embargo, se pide a las empresas que completen las secciones de la plantilla de datos que se aplican a sus operaciones. No se exige una “retorno nulo” a quienes no tienen exposición.