Según los analistas de S&P, el resultado de las elecciones estadounidenses de 2024, en las que los republicanos tomaron el control de la Casa Blanca, el Senado y el Congreso, podría remodelar significativamente el panorama regulatorio de las criptomonedas en el país.
Según un informe reciente de S&P Global compartido con crypto.news, este cambio político puede hacer que el enfoque estadounidense hacia la regulación de las criptomonedas pase de medidas basadas en la aplicación de la ley a un marco de elaboración de normas más predecible.
Estados Unidos ha estado a la zaga de otros mercados importantes en el avance de la claridad regulatoria para los activos digitales. Regiones como Europa han introducido marcos estructurados para monedas estables y otras actividades criptográficas.
Las monedas estables, un tipo de criptomoneda vinculada a monedas fiduciarias como el dólar estadounidense, son esenciales para permitir pagos basados en blockchain más allá de los mercados criptográficos.
En Estados Unidos, sin embargo, las empresas se arriesgan a acciones coercitivas por definiciones poco claras de valores, lo que da lugar a multas y disputas legales. La falta de claridad también afecta las apuestas, un proceso en el que los inversores bloquean sus criptoactivos para ganar recompensas. Si bien algunas empresas han dejado de ofrecer servicios de participación debido a la presión regulatoria, otras están impugnando estas restricciones en los tribunales.
“Las empresas de cifrado en los EE. UU. corren el riesgo de recibir multas y acciones coercitivas relacionadas con la cotización de valores no registrados. Esto se debe a la falta de claridad regulatoria sobre qué criptoactivos son valores”, escribieron los analistas.
Próxima legislación
Los analistas de S&P indicaron en su nota que se pueden esperar cambios regulatorios con respecto a las monedas estables y la custodia de criptoactivos a principios de 2025.
Además, los servicios de custodia de criptoactivos enfrentan desafíos importantes debido a las regulaciones existentes como el Boletín Especial de Contabilidad de la SEC – SAB 121. Esta regulación exige que las entidades que poseen criptoactivos en nombre de los clientes deben declarar estos activos como pasivos, lo que hace que la custodia de criptoactivos sea costosa para los bancos estadounidenses. .
Aunque a principios de este año se vetó una propuesta de derogación del SAB 121, la nueva administración podría reconsiderar esta cuestión, allanando potencialmente el camino para una mayor participación en el mercado.
¿Reserva de Bitcoin?
Una de las propuestas más ambiciosas proviene de la senadora Cynthia Lummis, quien sugiere que la Reserva Federal debería adquirir 1 millón de Bitcoin (BTC) en los próximos cinco años, aproximadamente el 5% del suministro total de Bitcoin. Sus defensores argumentan que esto podría proteger contra la devaluación de la moneda y gestionar la deuda nacional, mientras que los críticos cuestionan la viabilidad y las implicaciones de tal medida.
Incluso si el proyecto de ley no se aprueba, los analistas creen que la narrativa en torno a Bitcoin está cambiando, con una mayor atención a su papel en los mercados financieros tradicionales. Estas discusiones podrían alentar a otras naciones a considerar medidas similares, influyendo aún más en la adopción global de Bitcoin, según la nota.
Coordinación global: es hora de que EE. UU. se ponga al día
Más allá de las preocupaciones internas, S&P señala que la falta de participación de Estados Unidos en la coordinación regulatoria global ha obstaculizado la innovación blockchain en los mercados financieros. Una mayor participación de Estados Unidos podría ayudar a ampliar los casos de uso de blockchain existentes, tanto a nivel nacional como internacional.
“Creemos que una mayor participación de Estados Unidos puede permitir que casos de uso ya bien probados crezcan comercialmente, tanto a nivel nacional como global”, escribieron los analistas.
Mientras Estados Unidos entra en un período de posible transformación regulatoria, los participantes del mercado esperan los próximos pasos de los legisladores. Según S&P, los avances en el marco regulatorio podrían aportar una claridad muy necesaria y abrir nuevas puertas para la innovación y el crecimiento en el espacio de los activos digitales.